SED FUERTES PASE LO QUE PASE, DIGAN LO QUE DIGAN

                                                                     

Mis queridos amigos:

Hoy les deseo dejarles una reflexión sobre la fortaleza, ante lo que la vida nos va presentando y la toma de decisiones que muchas veces, debemos afrontar con dolorosa determinación.

En primer lugar vamos a clarificar, que no es lo mismo insensibilidad que fortaleza.

Para ser fuerte, hay que ser vulnerable y con ello se puede sufrir sin derrumbarse.

La fortaleza y el miedo, fortaleza y vulnerabilidad son quizás actitudes opuestas?

Para ser fuerte, hay que ser vulnerable. Solamente aquellas personas que tienen sensibilidad y capacidad de ser heridas, son las que pueden generar fortaleza, para arriesgarse a enfrentarse al sufrimiento y no ser dominado por esa parálisis de la voluntad ante el sufrimiento.

De hecho, no se trata de no tener miedo, eso es innato en el ser humano, que constantemente busca seguridades.

 Se trata, que a pesar de las inseguridades, sigamos nuestras metas, nuestros sueños, «pase lo que pase, digan lo que digan».

Que nadie, decida por nosotros cómo hemos de ser, cómo hemos de vivir.

Que nadie nos quite esa libertad de soñar.

 Sueñen amigos míos, todos los días.

 Un ser que no sueña  lo que desea ser o conseguir , ya sea en el plano material o espiritual, es un ser muerto , un parásito dispuesto a ver demonios en todas partes y no ser libre para vivir en la GRACIA de Dios.

No tengan nunca miedo a las malas críticas, a los juicios, sean siempre libres de sus actos con responsabilidad.

No tengan miedo de aquellos que solo pueden matar el cuerpo.

No consientan que les maten la dignidad propia y ajena.

No dejen que les roben el bello gesto de ser solidarios con cuantos sufren la incoherencia y la insolidaridad. Hagan siempre lo que su conciencia les dicte ante la misericordia que Dios  tiene con cada uno de nosotros.

Hay que ser tremendamente vulnerables para comprender el dolor y los miedos de los demás. Así seremos fuertes.

Quizás, amigos míos, solo pueda ser humano, el que es sensible y sea capaz de no hundirse ante los problemas cotidianos de la vida o no se sienta ufano ante el éxito.

Si realmente deseamos ayudar a nuestros hermanos en sus dificultades, tendremos que haber experimentado nosotros antes esas heridas, para saber sanar las suyas.

Acabo mi reflexión como conclusión:

Tan solo el que supo sufrir, podrá ser fuerte ante cualquier circunstancia.

Por esto puedo con la gracia de mi Dios, todos los días decirles:

«ESTOY A TU LADO»

Gracias amigos, por cuantos están dispuestos a ayudarme en la situación  en que me encuentro y poder seguir mis sueños, ayudando a cuantos lo necesitan.

Muy agradecida.

                                                          

                                                     

LES DEJO LA FRASE DE REGALO Y MI TERNURA CON UN BESO