HABLEMOS DEL AMOR Y DEL QUERER

                                PINTURA DE BERTHE MORISOT                                  

Hola mis queridos amigos:

Hoy vamos a hablar de AMOR, los poetas, los enamorados y los que amamos a Dios nos es una lengua necesaria en nuestra alma, corazón y labios, por eso hoy deseo hablarles de ese gran sentimiento en unos pocos pensamientos recogidos en mi alma de aquí, de allí.

Inicio este post con el amor de Madre.-

La historia de todo hombre está escrita en el corazón de su madre.

Una madre sabe cómo es su hijo, lo llevó en las entrañas y tras nacer quedó en su seno un gran hueco, pero no dejó de llevarle dentro se sí porque el amor a su hijo se inició desde toda la eternidad.

Una madre, lucha contra vientos recios y mareas arrasadoras ante cualquier dificultad en la vida, lo protege con su misma vida, lo lleva siempre como un bebé aunque ya tenga 50 años y sea ya un abuelo de una docena de nietos. Siempre lo llamará…«Niño, o niña ».

Es un amor grande el de una madre, yo recuerdo entrañablemente el amor de mi madre, como siempre me daba aliento para seguir mis estudios, para ser una buena ama de casa.

Hace unos días cuando les hablaba de que hay diferencias entre querer y amar, más de uno de ustedes me pidió que explicara la diferencia.

Miren…en el Evangelio, no encontraran que Jesús emplee la palabra querer cuando incita a sus discípulos a tenerse amor, les habla siempre de amarse.

¹⁵Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le respondió: Si, Señor; tu sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos. ¹⁶Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Si, Señor; tu sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas.¹⁷Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas    Jo 15,17.

LES DEJO AQUÍ UNAS REFLEXIONES

*Amar implica una total donación al Otro, sin esperar nada a cambio.

*El hombre que es capaz de amar por encima de todas las cosas sabe que va desnudo de todo lo que no sea amor y amor de caridad.

*Más aquel que solo quiere, puede haber en ese querer una cierta mezcal de interés que le impedirá darse de verdad en cuerpo y alma al Otro en reciprocidad.

*El que ama es como un árbol que cubre la mano de flores de aquel que lo sacude y no deja de dar fruto.

*El hombre no muere cuando deja de vivir, pero si muere cuando deja de amar.

*Cuando se ama, la cuestión no es amar más, sino amar mejor.

*En la vida hay algo mucho más temible que el fracaso en cualquier área profesional y es al no haber sabido amar.

Muchas veces estando recogida en la oración deseo que Jesús me pregunte… ¿Me amas Cecilia? Y como no me lo pregunta, yo misma se lo digo «tú sabes que te amo»

Les invito a que les pregunten a sus esposas/sos, hijos, amigos esa pregunta que posiblemente la estén esperando como yo la espero en mi corazón de enamorada.

¿Me amas?

Yo ya les contesto a ustedes por si quieren saberlo

Sor. Cecilia les ama.

LES DEJO MI TERNURA

Y UNA NOTA PARA MI ANÓNIMA, QUE NO VE LA CRUZ EN MI BLOG.
LA CRUZ ESTÁ EN MI ESCUDO DE LA ORDEN DE PREDICADORES.


                                                                      

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