Estimados amigos:
Hoy les presento una prosa poética de un hecho verídico que vino a mi correo del apostolado buscando ayuda, hace ya mucho tiempo
Introducción:.
Se trataba de un matrimonio de mediana edad, bien acomodados, sin problemas aparentemente, pero que la señora se enamoró de un amigo de su marido también casado y mucho más joven que ella.
Al principio ambos tontearon, pero él no deseaba tener más relación que de una amistad, eso sí, muy tentadora, más ella llena de pasión lo acosaba a todas horas, en el trabajo, por el móvil, por correo; el pobre hombre no vivía en paz .Mientras ella con un gran sufrimiento se acercó a « Estoy a tu lado» en busca de paz, más que para dejarlo.
Tras meses de seguimiento, al final, eso sí con mucho dolor, ella pudo dejar esa idea obsesiva de entregarse a este hombre, que no mostraba interés alguno y que él la rehuia constantemente.
En esta prosa, dejo todos los sentimientos y expresiones que ella me comentaba y algunos que como licencia poética añado yo.
Espero que les guste y no caigan en esa tentación que destruye a la persona y a las familias.
Sean ustedes muy fieles a sus respectivos conyugues.
INFIEL
Infiel, ni es hombre ni es mujer,
es poner otro Adán y otra Eva
en un paraíso para volver a tejer
un lazo corredizo de fina seda.
Infiel, suspira concupiscencia
en una pasión tan veraz y ciega
que encelada y sin conciencia
traiciona el primer amor y lo niega.
Infiel, a oscuras e insegura
camina de fiel disfrazada,
engaña, se tortura y calla
la vida pesa sin ser deseada.
Infiel, hoy lleva nombre de mujer
que no deja envejecer al amor
lo desvirtúa, lo niega al anochecer
en brazos de un galán con otro sabor.
Infiel, infiel, hoy me llamo infiel,
debato entre vida y la muerte
la vida se me ha vuelto pura hiel,
más temo, no tenerle que la muerte.
Infiel, ni es hombre ni es mujer,
soy una vergüenza y no me pesa
mil veces me entregaría a su ser,
pero mi galán hasta hoy, se niega.
Infiel, soy una mujer infiel,
lo se, más por un beso de él
me desharía en pura miel
hasta llegar a ser parte de él
Infiel, cauterio de profunda llaga
¡oh mano que acaricia mi piel!
que trastoca mis sentidos con tal paga.
que no puedo ni quiero vencer.
Autor Sor.Cecilia Codina
LES DEJO MI TERNURA
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