HISTORIAS DE SESY BO

Sesy Bo es el seudónimo de una niña rubia-castaña de ojos azules, muy despierta para hallar soluciones a sus problemas infantiles, es tozuda, constante, dulce, y respondona cuando la instigan sin razón.
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No es muy obediente ya que su afán por hacer cosas nuevas la llevan siempre a contrariedades con sus mayores .La mayor contrariedad fue hacer obras de caridad independientemente de ser merecedores o no de ella y que su abuela no lo aprobase

Sesy Bo, no se acobarda fácilmente, se hace fuerte, se crece ante las dificultades, no importan lo grandes o chicas que pueden ser, siempre tiene la mirada puesta en el horizonte y espera siempre del Cielo ayuda.

Es amante de los animales, hasta el punto de ser su única compañía pues no tenía hermanos y no la dejaban salir a jugar a la calle con los demás niños por miedo a que la atropellase uno de los pocos coches que circulaban por el barrio.

Su delicia era escribir cuentos, comedias y leer poesías y algo que siempre la tuvo pensando era ¿qué podía inventar que no estuviese ya inventado?
Siempre le gustó, el cine, la pintura, la escultura y sobretodo el teatro y que la llevasen al Gran Liceo de Barcelona a admirar y deleitarse con esas grandes voces de la opera.

Sesy Bo, era un nombre que oyó en la radio y se lo apropio, no sabemos porqué y ella no lo recuerda.
Tenía una gran afición a escuchar la radio, ponía su cabecita entre las dos puertecitas del mueble y ¡ya podían llamarla ya!, que no se movía allí gozando de de la narración de«Los episodios Nacionales» de Don. Benito Pérez Galdós o de cuentos, cualquier cosa que la hiciese imaginar, crear, vivir una aventura en su interior.

Le gustaba jugar con los niños, las niñas no las soportaba, las hallaba muy puestas en el rol de ser mamás, sin aspirar a otras cosas, jugar a «Papás y a mamás»le parecía algo tan estúpido que siempre se negó a ser cómplice de representar lo que en casa sus padres vivían.

Tenía especial predilección por los gitanos, por asearlos y compartir la merienda, pan con aceite y azúcar o bien pan con aceite y sal, no había más y un trocito tenía que ser para su amigo fiel su perro Panchito

Amaba toda la creación entera, en cada hoja de árbol veía ya todo un bosque frondoso a la vera de un río de aguas caudalosas y cristalinas. Las aves del cielo, los peces del mar, la lluvia, los relámpagos, las rocas, la arena, todo era una creación hecha por Dios Padre para que ella lo amase y cuidase.

Sesy Bo era una niña muy callada cuando iba de visita, muy obediente fuera de casa, ya que con una mirada de su abuela ya sabía que no debía hacer esto o aquello.
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No era tímida pero se hizo tímida ante repetidas maneras de lesionar su autoestima por las lagunas de su memoria debido a un accidente de moto a los 4 años, que la tuvo en coma durante tres meses y que condicionó en gran medida toda su vida infantil y juvenil.
También su vida de estudiante fue una lucha contra reloj, tenía que ganar esa carrera como fuese y logró vencer tras una gran lucha a su pequeña invalidez, aunque hoy día aún le han quedado ciertas secuelas que bien sabe llevar como si fuesen unas grandes amigas.

Sesy Bo, como ya habrán adivinado es Sor.Cecilia, una niña que soñó más allá de la realidad y hoy humildemente desea simplemente decirles:
«Estoy a tu lado»

LES INVITO A QUE ME CONOZCAN http://picasaweb.google.es/sorceciliacodina

                                                       
Reciban mi ternura.
Sor.Cecilia